Eso es lo que dijo un oficial de policía a la operadora del 911. La historia fue así, el oficial confiscó mariguana de cierto lugar y tuvo la grandiosa idea de hornearla, junto con su esposa, en unos brownies. Los comieron y esto fue lo que sucedió después:
Después de haberlos comido llamo al 911 por que según él creía que estaba muriendo y pedía ayuda. Esta de locos la escenita.